Un prendedor con forma de serpiente puede simbolizar renovación, transformación, curación, inmortalidad, sabiduría, amor y lealtad. 
La serpiente muda de piel, lo que simboliza el renacimiento y el abandono de lo viejo para dar paso a lo nuevo. Representa la eterna juventud del alma.

Perfecto para añadir un toque único a chaquetas, bolsos o prendas, esta pieza destaca por su delicadeza y su acabado brillante, siendo el accesorio ideal para quienes valoran los detalles originales y llenos de estilo.

Un broche de serpiente puede añadir un toque de elegancia y gracia a cualquier atuendo.